El pasado viernes 20 de septiembre, día mundial del Librepensamiento, el Club Liber Cogitatio inició su nuevo ciclo de conferencias 2024/2025. Para estrenar este nuevo curso contamos con un ponente de lujo, Santiago Castellà Surribas, quien nos ofreció una ponencia titulada Democracia, laicidad y ciudadanía. El acto contó, también, con unos excelentes asistentes .
La charla fue un repaso de la entrada del humanismo y de la progresiva secularización en el derecho. Castellà sitúa en la Paz de Westfalia la irrupción del humanismo racionalista en el derecho, ya que esta estableció un cambio de rumbo sin precedentes en la defensa del librepensamiento al sentar las bases de la soberanía nacional y en el establecimiento de la libertad religiosa. Este espíritu humanista evolucionó con las Luces en un antropocentrismo radical que se vio posteriormente reflejado en cartas de derechos tales como The Bill of Rights, en el Reino Unido, la Declaración de Independencia de los EUA, en la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano y, también en la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana.
El ponente explicó que, a lo largo del siglo XIX, con la consolidación de los estados nación, el humanismo se vio blindado en las distintas constituciones, pero aún no habría hasta el siglo XX, tras la Segunda Guerra Mundial, el establecimiento de una universalización de derechos. Efectivamente, la Declaración Universal de los Derechos Humanos marcó un hito en la consolidación de los derechos y libertades de la humanidad, siendo la libertad religiosa un derecho fundamental. Ya en el siglo XXI, contó Castellà, la aprobación de los ODS en la Agenda 2030 supuso por primera vez en la historia la adhesión casi todos los gobiernos a un conjunto de medidas para preservar y promocionar un conjunto de derechos sociales y de medidas contra la contaminación y el calentamiento global.
Por último, Castellà se refirió a la laicidad como el producto de la secularización y puso sobre la mesa distintas contradicciones que se encuentran las democracias más avanzadas, tales como los nuevos procesos de contrasecularización iniciados por los nuevos movimientos de extrema derecha.
Al finalizar la ponencia se dio paso a un debate que propició varias intervenciones e intercambio de ideas que pusieron de relieve la necesidad de preservar los valores humanistas y de encarar los retos de las sociedades interculturales.
La cena coloquio reunió a unas cincuenta personas que contribuyeron, una vez más, al intercambio de ideas desde la serenidad y la fraternidad.